Muchas veces el diagnóstico debe ser confirmado mediante un método que le dé validez. Por ejemplo, el dolor de espalda se puede dar por muchos motivos: problemas musculares, de los huesos, de los nervios, entre otros. No siempre se puede identificar el motivo del dolor con el examen físico. Para ello, se realizan muchas veces infiltraciones con el fin de reconocer el lugar exacto del origen del dolor. Esto es lo que en Tratamiento Para el Dolor llamamos “Bloqueos Diagnósticos”.